PAN DE AJO Y QUESO

Calentamos un poquito la leche hasta que esté tibia, no debe quemar. La pasamos a un bol, le añadimos la levadura fresca de panadería desmenuzada y la disolvemos removiendo con la varilla. Añadimos un huevo entero y removemos bien.

En otro bol añade la harina sin gluten, el psyllium, la goma xantana, la levadura química y el azúcar. Y lo mezclamos todo. Aquí mismo puedes agregar 3 gramos de sal. Yo no se la pongo porque la harina que utilizo ya lleva.

Pasamos los ingredientes secos al bol de la leche tamizándolos con un colador. Removemos un poco con las varillas paradas y ahora ponemos en marcha las varillas de gancho y amasamos durante cinco minutos. Pasados los cinco minutos, añadimos la mantequilla, cortada en dados y a temperatura ambiente, poco a poco, para que se vaya integrando muy bien. Si tienes la mantequilla fría de la nevera la puedes poner unos quince segundos al microondas para que se ablande. Cuando hayamos terminado de incorporar la mantequilla seguiremos batiendo 10 minutos más.

Te quedará una masa muy fina y bastante pegajosa, por lo que le daremos forma de bola con la ayuda de una espátula, la cubriremos con papel film y la pondremos dentro del horno apagado con una olla de agua caliente en la parte de abajo, si es invierno, para que suba la temperatura y leve más rápido. Si es verano no será necesario poner la olla de agua caliente.

Deja pasar una hora y verás que la masa casi ha triplicado el volumen. Espolvoreamos la mesada con harina de arroz y ponemos la masa encima. La espolvoreamos también por encima para poderla manejar mejor y la ponemos hecha una bola encima de la bandeja de horno con un papel sulfurizado. La aplastamos un poquito, con cuidado para no desgasificarla demasiado, hasta que quede de un grosor como de un dedo y medio. Si se nos pega en las manos echamos una pizca más de harina.

Ya la tenemos a punto de hacerle unos cortes, no demasiado profundos, ya sea con un cuchillo bien afilado o con una cuchilla y después de cada corte limpiaremos el filo antes de hacer el siguiente. Seguimos haciendo cortes perpendiculares, hasta formar una cuadrícula y ahora le ponemos el picadillo de aceite, ajo y perejil intentando que penetre bien en los cortes, para que tome bien el saborcito rico del ajo y perejil. Por encima ponemos el queso rallado, puede ser mozzarella, emmental o el que más te guste, y por encima espolvoreamos con pimentón dulce y orégano. Yo se lo he puesto seco pero si lo tienes fresco, mejor que mejor.

Ahora mismo ya tiene una pinta que promete. Lo ponemos en el horno que hemos precalentado a 200 grados, en la parte de abajo, y bajamos la temperatura a 170º y lo dejaremos durante quince minutos.