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Tiempo Prep20 minutos
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Tiempo cocción7 minutos
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Comensales4
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Ready In1 hora
Si eres amante de los placeres dulces y sigues una dieta libre de gluten, te invitamos a descubrir las galletas danesas sin gluten de El Menú de Gemma.
Estas galletas de mantequilla sin gluten son la perfecta combinación de textura suave y sabor exquisito, haciendo que sea imposible comer solo una.
Una experiencia de sabor inolvidable
Las galletas de mantequilla danesas sin gluten destacan por su sabor delicado, gracias a la mezcla de ingredientes seleccionados de la receta. Al primer bocado, sentirás cómo se deshacen en tu boca, dejando un rastro de dulce y mantequilla que te hará querer otra inmediatamente. Su textura, tan ligera y suave, es un testimonio del cuidado con el que están hechas, y el toque sutil de vainilla las convierte en un capricho ideal para cualquier momento del día. ¡Atención que el aroma de vainilla sea sin gluten!
Consejos para una mejor experiencia
Para disfrutar plenamente de tus galletas danesas sin gluten, te recomiendo:
- Almacenamiento adecuado: Guarda las galletas en un recipiente hermético para mantener su frescura y textura por más tiempo.
- Decoración creativa: Puedes añadir un toque festivo decorándolas con azúcar glas, sumergiéndolas en chocolate o añadiendo un toque de frutos secos.
- Acompañamientos perfectos: Estas galletitas sin gluten son ideales para acompañar una taza de té o café, o como una delicada opción de postre en una reunión.
Otros dulces aptos para celíacos igualmente irresistibles son las cookies de chocolate o los almendrados sin gluten.
Galletas danesas: el placer de saborear sin gluten
Estas galletas sin gluten no solo son deliciosas, sino que también son una excelente opción para aquellos que desean evitar el gluten sin renunciar a disfrutar de sus postres favoritos. Además, si eres celíaco ya no tienes que renunciar a abrir una de estas latas de galletas.
Perfectas para compartir con amigos o familiares, o simplemente para darte un capricho en esos momentos en que necesitas un poco de dulzura en tu vida. Verás que estas galletas danesas sin gluten son una adición ideal a cualquier mesa de postres. Ya sea como parte de una merienda o como un regalo especial, no te resistirás a su tentación.
Anímate a preparar estas galletas libres de gluten y disfruta del placer de cada bocado. Con la receta de El Menú de Gemma en YouTube, tienes la oportunidad de deleitarte con unas galletas tan irresistibles que será difícil detenerte en una sola. ¡Descubre por ti mismo por qué estas galletas danesas sin gluten son una verdadera joya culinaria!
Te dejo ahora con los pasos para elaborar esta delicia. Disfruta el irresistible sabor de las galletas danesas sin gluten: suaves, mantecosas y perfectas para cualquier ocasión especial.
Ingredientes
GALLETAS DANESAS SIN GLUTEN
Pasos
Hoy preparamos galletas danesas sin gluten. ¡Te encantarán!
Para hacer estas ricas galletas vamos a utilizar una yema de huevo. La clara la separamos y la reservamos en la nevera para otra preparación, como el pan nube o los almendrados. Ponemos la yema en un bol, le añadimos el azúcar y lo batimos con las varillas eléctricas. Agregamos un chorrito de aroma de vainilla sin gluten, una pizca de sal (yo no le pongo porque la harina que uso ya contiene sal) y la mantequilla a temperatura ambiente y cortada en daditos. Lo mezclamos todo junto hasta tener una crema.
Por otra parte mezclamos la harina sin gluten con la levadura química o polvos de hornear, y la añadimos a la mezcla anterior tamizándola con un colador. Ahora lo mezclaremos todo pero ya no usaremos las varillas eléctricas. Lo haremos con la ayuda de la lengua o de una espátula porque esta masa no quiere ser muy trabajada, sólo lo justo para que se integren todos los ingredientes. Por eso es tan fácil y tan rápida de hacer.
En este momento podemos seguir mezclando con las manos siempre bien limpias. Cuando ya tenemos una masa homogénea, le damos forma de bola y la dejamos reposar tapada con un trapo y siempre fuera de la nevera durante media hora.
Pasada la media hora, ponemos la masa de las galletas dentro de una manga pastelera a la que le hemos puesto una boquilla y ya podemos dar forma a nuestras galletas. Las iremos poniendo encima de un papel de hornear o un tapete de silicona. Le podemos dar la forma que queramos. Yo he hecho de tres formas distintas, unas en forma de rosquilla, otras en forma de flor y otras haciendo como una ese.
Las horneamos con el horno precalentado a 200º entre 5 y 10 minutos. Ve vigilándolas muy de cerca porque se hacen enseguida y no tienen que dorarse mucho. Las dejamos enfriar en la misma bandeja porque salen muy blandas y si las tocamos se rompen.
Conclusión
Cuando ya están frías están súper crujientes y las podemos guardar dentro de una caja típica de galletas danesas, que lavé muy bien con agua y jabón, con un papel de horno en el fondo. Y las puedes poner con el típico envoltorio blanco o sueltas con mucho cuidado de que no se rompan. ¡Buen provecho!
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